Incrustados en un trozo de acero fundido, ente los escombros de las Torres Gemelas tras el 11S, unos versículos daban una lección divina
Cuando Joel Meyerowitz vio el objeto, quedó al instante impactado por el pasaje por donde el libro había quedado abierto: “Oísteis que fue dicho: ‘Ojo por ojo y diente por diente’. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra”.
En 2012, Joel Meyerowitz donó el objeto al museo en memoria del 11 de septiembre, donde se expone tal cual es.