bendita madre de la Virgen María, Nuestra Señora,
esposa del justo y buen san Joaquín,
y patrona, cuidadora y benefactora de la familia,
a Ti confiadamente encomiendo mis hijos
¡bendíceles oh misericordiosa y buena santa Ana,
y tómalos bajo tu protección!
ten compasión de ellos, ayúdalos en su caminar
líbralos de tantos males como nos rodean
y cólmalos de tus maternales cuidados
para que siempre estén sanos, felices y gocen de bienestar.Ampara y ayuda a mi hijos ……. (decir sus nombres)
que no pasen por sufrimientos ni desdichas
y que no carezcan de lo necesario;favorécelos para que puedan alcanzar sus sueños
y cumplir las metas que se propongan;
que no les falte el alimento del alma y cuerpo:
pongo en tus manos sus necesidades temporales
así como su salvación eterna.
Haz de ellos unas personas de bien,
ten compasión de ellos, ayúdalos en su caminar
líbralos de tantos males como nos rodean
y cólmalos de tus maternales cuidados
para que siempre estén sanos, felices y gocen de bienestar.Ampara y ayuda a mi hijos ……. (decir sus nombres)
que no padezcan dolores ni enfermedades,
que no pasen por sufrimientos ni desdichas
y que no carezcan de lo necesario;
favorécelos para que puedan alcanzar sus sueños
y cumplir las metas que se propongan;
que no les falte el alimento del alma y cuerpo:
pongo en tus manos sus necesidades temporales
así como su salvación eterna.
(exponer el problema y lo que se desea conseguir).
Santa Ana, no permitas que siga sufriendo,
intercede ante tu Santísima Hija, María,
y tu Gloriosísimo Nieto, Jesús,
para que alejen de el-ella todo agobio y tribulación
y en breve reciba toda la ayuda que precisa.
Santa Ana, tu que fuiste Espejo de Paciencia,
concédeme la virtud de sufrir con paciencia y amor
las dificultades que se me presenten
en la educación y cuidados de mis hijos,
para ellos y para mí, pido tu bendición y auxilio.
Quiero pedirte también por todos los niños y jóvenes del mundo,
especialmente a los más pobres y abandonados
haz que también ellos encuentren
en el Corazón Inmaculado de tu Hija,
y en el Sagrado corazón del buen Jesús
el refugio, el auxilio y la protección que les hace falta.
¡Oh bondadosa santa!
por todo el amor que tuviste a tu Sagrada Familia
haz que no nos falte nunca la armonía y la felicidad
y que gocemos del bienestar físico y espiritual.
Enséñanos a todos a amar a Dios sobre todas las cosas,
como enseñaste a Tu Purísima Hija
la Inmaculada Virgen María,
haz que vivamos conforme a la voluntad de Dios
y que después de esta vida hallemos
la bienaventuranza en la otra,
reuniéndonos contigo en la Gloria por toda la eternidad.
Así sea.
Rezar tres Avemarías, tres Padrenuestros y Gloria.
La oración y los rezos se hacen por tres días seguidos.
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