Mechaele Loraff se dirigía a su trabajo al amanecer cuando vio un fenómeno en el cielo que la hizo detener su marcha: El sol parecía haber tomado la forma de una cruz. Su fotografía ha dado la vuelta al mundo.
El fenómeno ocurrió el miércoles 13 de enero al amanecer y fue visto en la localidad de Buchanan, Michigan. Según los expertos del servicio meteorológico estatal, la luz del sol en la aurora se proyectó en las nubes y se generó la hermosa imagen. Para Loraff, fue una manifestación sublime de la naturaleza que ayuda a recordar a Dios.
fuente: aciprensa