En el primer día de su histórico viaje apostólico en Irak, el Papa Francisco recibió este 5 de marzo una hermosa estola hecha a mano por artesanos de Qaraqosh, ciudad también conocida con el nombre de Baghdeda o Bajdida, localizada en la llanura de Nínive.
El Santo Padre dirigió el rezo del Padrenuestro con la estola puesta al término del encuentro con los obispos, sacerdotes, religiosas, seminaristas y catequistas en la Catedral católica siria de “Nuestra Señora de la Liberación” de Bagdad.
La estola que recibió el Papa tiene como decoración una palmera, símbolo de Irak, que también está presente en el logo de la visita pontificia. En el lado izquierdo se puede apreciar una imagen de la Virgen María y al lado derecho uina imagen de Cristo, además de algunos racimos de uvas.
La estola obsequiada al Papa Francisco. Foto ACN
Por su parte, el Santo Padre regaló un cáliz al Patriarca siro católico, Ignacio José Ignazio III Younan, quien regaló también un relicario al Papa que besó antes de finalizar el encuentro.
Además, el próximo domingo 7 de marzo el Pontífice recibirá otra significativa estola realizada por artesanos de Qaraqosh durante su visita a la iglesia de Al Tahira.
La realización de ambas estolas fue un encargo del párroco de Al Tahira, P. Yako Ammar, quien explicó a la fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) la simbología de la estola que el Papa Francisco recibirá el próximo domingo.
Según describió P. Ammar, la estola “fue totalmente confeccionada a mano con la tela tejida por Khaya Bakter, un artesano local y con los colores típicos tradicionales (negro y púrpura) de Qaraqosh, mientras que a Gorjia Kapo, madre de dos hijos y una hija, se le ha encomendado la labor de bordar y ornamentar la estola”.
“A un lado de la estola está escrito el Padrenuestro en nuestra lengua, el siríaco, que proviene del arameo, la lengua original de Jesús; y al otro lado está escrita la oración del Ave María”, indicó el sacerdote iraquí.
Además, la estola que recibirá el Papa tiene el diseño de dos cruces en los dos extremos de la estola que “son las cruces de la iglesia de Al Tahira, las mismas que se encuentran en el interior de la iglesia y que fueron destruidas por el ISIS durante la ocupación”.
“Estas cruces son ahora símbolo de una nueva vida. Como la estola es un ornamento altamente simbólico para nosotros, sacerdotes, también se bordaron el pan y el vino, símbolos del misterio eucarístico”, destacó P. Ammar.
Antes de la invasión del Estado Islámico, Qaraqosh era la ciudad cristiana más grande de Irak. Sin embargo, de 2014 a 2016, estuvo bajo el dominio de los yihadistas y decenas de miles de cristianos tuvieron que abandonar sus hogares.
La iglesia de Al-Tahira está dedicada a la Inmaculada Concepción y durante la invasión del Estado Islámico “fue severamente dañada e incendiada, y se saquearon objetos de valor y muebles. La torre del reloj de la iglesia fue dinamitada y numerosas pinturas y objetos religiosos quedaron gravemente dañados”, relató P. Yako Ammar.
En octubre de 2016 las fuerzas iraquíes y sus aliados recuperaron estos territorios y poco a poco se ha trabajado en la reconstrucción, algunos cristianos han vuelto.
De acuerdo con los últimos datos publicados por ACN, el 43% de las familias cristianas que vivían en Qaraqosh antes de la invasión del Estado Islámico han podido regresar.
Fuente: Aciprensa