Jesús manso y humilde de Corazón, Óyeme!
Del deseo de ser lisonjeado, líbrame Jesús. Del deseo de ser alabado,líbrame Jesús.
Del deseo de ser honrado, líbrame Jesús. Del deseo de ser aplaudido, líbrame Jesús
Del deseo de ser preferido a otros, líbrame Jesús. Del deseo de ser consultado, líbrame Jesús. Del deseo de ser aceptado, líbrame Jesús.
Del temor de ser humillado, líbrame Jesús. Del temor de ser despreciado, líbrame Jesús. Del temor de ser reprendido, líbrame Jesús.
Del temor de ser calumniado, líbrame Jesús. Del temor de ser olvidado, líbrame Jesús. Del temor de ser puesto en ridículo, líbrame Jesús.
Del temor de ser injuriado, líbrame Jesús. Del temor de ser juzgado con malicia, líbrame Jesús.
Que otros crezcan en la opinión del mundo y yo me eclipse, Jesús dame la gracia de desearlo. Que otros sean alabados y de mí no se haga caso, Jesús dame la gracia de desearlo.
El perdonar prontamente a los que me ofendan, concédeme, oh Jesús! La prudencia de callar en las cosas ajenas, concédeme, oh Jesús! La paz y la caridad con todos, concédeme, oh Jesús!
Oh María, Reina, Madre, Maestra de los humildes, ruega por mí. Oh todos los justos, santificados especialmente por el espíritu de humildad, rueguen por mí.
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