Seráfica Vírgen, Santa Clara de Asís, a tus plantas me llego con el corazón lleno de confianza en tu maternal intercesión, pidiéndote me alcancéis el perdón de mis pecados, para que como Tu, pueda yo nutrirme del cuerpo inmaculado de Cristo, bañarme en su Sangre redentora, derramar mi alma en la suya Divina, y quedar deificado como Tu, al contacto misterioso de sus resplandores Eucarísticos. Ruega a tu adorable esposo Jesús, se digne inclinar hacia mi alma su mirada misericordiosa, e infundir en ella su amor y su gracia, para que hermoseada y hecha partícipe de su naturaleza Divina, pueda recibir la gracia que humildemente imploro en esta novena. Amén
Día Quinto
!Oh virgen Clara ! Circundada de divinas claridades; por la dulcedumbre que gustabas cuando al comulgar se recreaba el Divino Nino Jesus en tus virginales brazos, obténme el don precioso de la contemplación que diviniza, anticipandonos la gloria celestial. Amén. ( Un Padrenuestro, tres Avemarías y un Gloria al Padre.)
Oración final para todos los días
¡Acuérdate! ¡Oh serenísima estrella de mi vida, madre mía Santa Clara! Acuérdate que jamás mortal alguno ha quedado sin consuelo al invocarte. Animado ya con la firme confianza de que tus ruegos son prontamente atendidos, a ti recurro, suplicándote no desoigas mis plegarias. Por la Vírgen María delicia de tu alma, mírame piadosamente y obtenme la gracia que tanto anhelo, si es para gloria del Señor y bien de mi alma. Así sea. Cuenta Instagram de la Luz de Maria -> AquíPuede interesarte -> Novena a Santa Clara de Asís – Día Cuarto