El 16 de diciembre es la tercera fecha del prodigio del santo patrón de Nápoles. Es el aniversario de la erupción del Vesubio en 1631: los napolitanos pidieron la intercesión del mártir y la lava se detuvo en el puente de la Magdalena
En Nápoles se repitió el prodigio del milagro de San Genaro.
La sangre de San Genaro se derritió a las 17.43, provocando un suspiro de alivio en la catedral y a millones de napolitanos que esperaban desde esta mañana el tercer «prodigio milagroso» de 2024. La historia enseña: cuando no se ha derretido la sangre, han ocurrido fechorías. Y por eso los napolitanos – devotos y ateos – esperaban ansiosamente la repetición del milagro.
El “milagro secular” de San Gennaro el 16 de diciembre
La del 16 de diciembre se define como un “milagro secular” y se recuerda la erupción del Vesubio en 1631, cuando los napolitanos invocaron la intercesión del mártir para salvar la ciudad de la destrucción.. Preocupados, los napolitanos llevaron en procesión el busto de San Genaro y las ampollas que contenían su sangre, llegando hasta el actual Ponte della Maddalena, en la periferia oriental de la ciudad, donde la lava avanzaba amenazante. De repente, cuenta la leyenda, el magma se detuvo, salvando a la ciudad y creando así la base para la tercera celebración del santo durante el año.
“Nuestra devoción a San Gennaro va acompañada del mensaje de Jesús, por eso creemos que Dios mismo está presente en la historia de la humanidad. Gennaro se hace compañero de este camino, fue el primero en confiar en Jesús y dar su vida por él, y todavía hoy nos anima a hacer lo mismo en este extraordinaria historia de una relación con una persona que murió hace 1700 años, y que hoy sigue viva y presente”, declaró el abad Vincenzo De Gregorio.
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