Seis días antes de la Pascua, fue Jesús a Betania, donde vivía Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Allí le ofrecieron una cena; Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban con él a la mesa. María tomó una libra de perfume de nardo, auténtico y costoso, le ungió a Jesús los pies y se los enjugó con su cabellera. Y la casa se llenó de la fragancia del perfume.
Judas Iscariote, uno de sus discípulos, el que lo iba a entregar, dice:
«¿Por qué no se ha vendido este perfume por trescientos denarios para dárselos a los pobres?».
Esto lo dijo, no porque le importasen los pobres, sino porque era un ladrón; y como tenía la bolsa, se llevaba de lo que iban echando.
Jesús dijo:
– «Déjala; lo tenía guardado para el día de mi sepultura; porque a los pobres los tenéis siempre con vosotros, pero a mí no siempre me tenéis».
Una muchedumbre de judíos se enteró de que estaba allí y fueron, no sólo por Jesús, sino también para ver a Lázaro, al que había resucitado de entre los muertos.
Los sumos sacerdotes decidieron matar también a Lázaro, porque muchos judíos, por su causa, se les iban y creían en Jesús.
Palabra del Señor
Puede interesarte -> Si nos distraemos cuando oramos, ¿es válida la oración?
Cuenta Instagram de la Luz de Maria -> Aquí
Salmo 26,1.2.3.13-14 R/. El Señor es mi luz y mi salvación El Señor es la defensa… Read More
Cuántas veces, mientras oramos, nos distrae algo que nos rodea o otros pensamientos. ¿Qué ocurre?… Read More
Medjugorje: ¿Qué tiene que decirnos hoy la Reina de la Paz? Mensaje del 25 de… Read More
Primera Lectura Lectura del libro de Isaías (50,4-17): El Señor Dios me ha dado una… Read More
Pasión de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas (22,14–23,56): Llegada la hora, Jesús se sentó… Read More
«Con esta tierra de pecado obraré grandes milagros para la conversión de los incrédulos». Cada… Read More